Quieres detener la tartamudez? El tartamudeo es un trastorno de la comunicación que afecta a alrededor del 1 por ciento de la población de todo el mundo. Muchos factores contribuyen a un problema de tartamudeo, incluyendo la genética, otro trastorno del habla, neurofisiología y dinámica familiar.
La tartamudez suele ser tratada con éxito a través de la terapia del habla y ciertos cambios en el hogar y estilo de vida, como unirse a un grupo de autoayuda, crear un ambiente familiar relajado, evitar críticas y tener una actitud comprensiva hacia el tartamudo, según el Instituto Nacional de la Sordera y Otros trastornos de la comunicación.
Te gustaría dejar de tartamudear de una vez por todas? Conoce el método más efectivo para detener la tartamudez de forma fácil y en poco tiempo!
Ciertos ejercicios también pueden ayudar.
Ejercicios de respiración
La tartamudez a menudo aumenta durante los momentos de estrés y ansiedad. Según el Instituto Nacional sobre la Sordera y otros trastornos de la comunicación, la regulación de tu respiración puede ayudar a reducir la tartamudez. Un simple ejercicio para tratar se llama respiración diafragmática.
Esta técnica de respiración puede ayudarte a estar más tranquilo y relajado, especialmente si necesitas hablar frente a una audiencia o en otra situación que te ponga nervioso. Si es posible, siéntate en una habitación tranquila donde no te molestarán por unos momentos.
Cierra los ojos y concéntrate en tu respiración. Coloca una mano sobre tu vientre y observa cómo sube y baja cuando inhalas y exhalas. Profundiza tu respiración y trata de hacer tu respiración lenta y relajada. Permite que los pensamientos fluyan de tu mente. Practica esta técnica durante cinco minutos cada día.
Relajación progresiva
Según el ex tartamudo T.D. Kehoe en su libro "Patología del Habla y Lenguaje - Tartamudez", los ejercicios de relajación progresiva que se centran en relajar los músculos de la producción del habla, como los labios, la lengua, la mandíbula y los pulmones pueden ayudar a reducir la tartamudez.
La relajación progresiva se realiza mejor mientras estás acostado con los ojos cerrados.
Toma algunas respiraciones profundas, luego concéntrate en tu mandíbula. Aprieta la mandíbula firmemente durante unos segundos, luego permite que se relaje completamente. Presiona tu lengua contra el techo de tu boca tan fuerte como puedas durante unos segundos, luego deja que se relaje completamente.
Presiona tus labios juntos durante unos segundos, luego deja que se relajen. Repite este proceso cuatro o cinco veces.
Ejercicio de habla lenta
Practicar lo que quieres decir de antemano puede ayudar a reducir la tartamudez, especialmente si se ralentizan las vocales y se relaja la respiración, de acuerdo con Kehoe. Practica diciendo unas pocas frases lentamente, estirando las vocales el mayor tiempo posible.
Toma respiraciones profundas y lentas. Practica delante de un espejo, aumentando lentamente la velocidad de tus oraciones hasta que estés hablando a un ritmo normal.
Ejercicios de Lectura
Al igual que con el ejercicio de habla lenta, los ejercicios de lectura pueden reducir la tartamudez a través de la ralentización de las vocales, concentrándote en tu respiración y tratando de relajarte. Lee un párrafo de tu libro favorito sin poner ninguna presión o estrés en ti mismo para hacerlo bien.
Simplemente relájate y lee, tratando de disfrutar del proceso en lugar de centrarte en no tartamudear. Si tartamudeas, sigue leyendo y no te culpes a ti mismo. Practica leer en voz alta durante media hora todos los días.
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